Seguramente Tom aprecia la similitud entre Edimburgo y Dublín cuando llega allí desde Belfast la última semana de julio de 1793. Algunos edificios emblemáticos de esta ciudad como el edificio Four Courts al lado del río están en construcción al igual que la infraestructura del Royal Canal que en esos momentos está siendo supervisada y excavada laboriosamente por equipos de trabajadores. Los hijos de los comerciantes se están estableciendo como una gran fuerza reformista en la ciudad. Antiguas familias protestantes se escandalizan ante el número de pensadores liberales como John Curran, abogado que representa a clientes cuyos casos normalmente sirven para poner en relieve la falta de igualdad del viejo régimen.